Un homenaje a los inicios del cine 29 de Febrero del 2012.Un fin de semana muy activo para
Hollywood, ya que se llevo a cabo la
84va edición de los premios Oscar, en donde las mejores producciones y actuaciones del séptimo arte trataron de hacerse de la preciada estatuilla de oro, siendo alcanzada solo por pocos.
Una de las cintas que se hizo de esta estatuilla en varias nominaciones es
The Artist, cinta dirigida por
Michel Hazanavicius el cual nos transporta a la ciudad de Hollywood en el año de
1927, donde
George Valentín (Jean Dujardin) es la estrella de un cine mudo que está llegando a su fin ante la inminente llegada del cine sonoro. Mientras esta situación comienza a crecer día con cada día una bailarina descubierta por el propio
Valentín llamada
Peppy Miller (Bérénice Bejo) comienza a hacerse de mucha fama gracias a el cine sonoro por medio del baile.
Aunque en este punto podríamos asumir que la historia trataría sobre salvar al cine mudo,
The Artist nos presenta a
Valentín en la encrucijada de su vida, ya que este se rehúsa a dejar de hacer cine mudo, ya que considera que el cine sonoro no tiene ninguna oportunidad ante este, aunque conforme vayamos avanzando en la cinta veremos el inicio de la adaptación a este nuevo medio, cosa que el propio
Valentín al principio muestra en claro con su total desprecio e incluso considera que es el final de su carrera de actor como tal. Otro de los puntos que hacen de esta cinta un éxito es la relación del actor principal de con su perro
Jack, con el cual lleva una mejor relación que con su esposa
Doris.
La cinta es un gran homenaje al inicio del séptimo arte, ya que lejos de utilizar las técnicas de digitalización, o utilizar los recursos más modernos para hacer cine, regresamos a más de ocho décadas en donde el cine era en blanco y negro y claro está que mudo, aunque podemos ver ciertos usos de nueva tecnología. La intención de la cinta nos deja en claro como la evolución para ciertas personas llega a ser un gran obstáculo.
Sin lugar a dudas el éxito de
The Artist es el de ser una película que nos transporta a una era del cine en donde el
3D no era el atractivo principal de cada estreno, ni los grandes efectos visuales, ni el uso de grandes pantallas como el de formato
IMAX para ganarse un lugar entre las cintas que vale la pena ver, ya que utilizando los recursos más antiguos y efectivos del cine, ha logrado convertirse en uno de los mejores éxitos del cine de los últimos años.
En otras palabras
The Artist es un claro homenaje a los inicios de la industria del cine, no era de extrañarnos que en esta edición de
los Oscares fuera galardonada con varios premios, haciéndose de varios como el de mejor actor, dirección, diseño de vestuario y el más significativo de todos; el de mejor película.
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